Cómo cuidar los libros

Para retirar los libros del estante

1. Empujar los libros que están a los costados.
2. Tomar el libro seleccionado por el lomo con una mano y sostener su pie con la otra, como muestra Benjamín, de 5º B.
   
3. Devolver los libros del punto 1 a su lugar, cuidando que no queden inclinados.
   

Si hay espacio suficiente entre la cabeza de los libros y el estante ubicado encima, también puede retirárselo así:

1. Colocar la mano por encima del libro elegido.
2. Empujarlo desde atrás hasta que el lomo quede expuesto.
3. Retirar el libro envolviéndolo con una mano y sostener su pie con la otra mano.
4. Reacomodar los libros que queden en el estante, de manera que no queden inclinados.
   

Para leer

1. Apoyar los libros en la mesa o en ambas manos.
2. Abrirlo en forma de V suave; no forzar su apertura.
3. Usar señaladores. No colocar objetos extraños, como clips o lápices, para marcar las hojas cuando se cierra el libro.
4. Prestar atención al apoyar las manos y los brazos para no doblar las hojas.
5. Guardar el libro en el estante en forma perpendicular, no inclinado.

No es conveniente

1. Retirar el libro tomándolo por la cofia (parte superior del lomo), porque se rompe.
2. Arrastrarlo por el estante, porque se desgastan la tapa y el canto inferior (las hojas en su parte inferior).
3. Abrir los libros a 180º, cuando las hojas están pegadas, porque se despegan las hojas y el lomo.
4. Sostener el libro abierto con una sola mano, dejando una parte sin apoyo, porque se despegan las hojas y la tapa.
5. Escribir los libros.
6. Mutilar los libros (romperlos).
7. Humedecer la yema de los dedos para pasar las páginas, porque lo ensucias.
   
8. Comer y beber cuando lees, porque puedes ensuciar el libro.

Gabriel, Araceli, Briza y Kiara de 5º B muestran los daños irreversibles producidos en los libros.
No los dañes. Cuídalos. Son para tu uso y para uso de todos.